La Sociedad Americana de Cáncer calcula que, en Estados Unidos durante el 2017, más de 22 mil mujeres deberán recibir un diagnóstico de cáncer de ovario y más de 14 mil morirán por esta enfermedad. ¿Por qué son tan alarmantes las cifras? El cáncer de ovario es una enfermedad mortal, pero también silenciosa.
Este mal se confunde –la mayoría de las veces– con colitis; además de que el diagnóstico correcto tarda en aparecer entre 6 y 12 meses. Por lo que evitar las muertes por cáncer de ovario se ha convertido en un desafío de poco éxito.
Hablamos de madres, hermanas, parejas, abuelas, maestras, amigas, compañeras, esposas; hablamos de miles de vidas que esta confusa enfermedad se cobra todos los años. La mayoría de las mujeres a quienes se les detecta cáncer de ovario a tiempo puede vivir más de 5 años; sin embargo, sólo 30 % de las afectadas siguen vivas después de ese periodo de tiempo, advirtió Dolores Gallardo, radióloga y experta del Instituto Nacional de Cancerología (Incan).
Detección
Entonces, ¿cómo detectarlo a tiempo para lograr la mayor calidad de vida posible? Durante una conferencia con motivo del Día mundial contra el Cáncer de Ovario (8 de mayo), se señaló que la realización del ultrasonido transvaginal es sumamente necesario cada seis meses en el caso de las mujeres con antecedentes familiares con males en mama y ovario, o cada 12 meses en aquellas diagnosticadas con colitis.
Por lo tanto, los primeros síntomas a los que se les debe poner atención para descartar el cáncer de vario son sumamente parecidos a los de la colitis. Es decir, episodios de diarrea, estreñimiento y distensión abdominal muy frecuentes o de difícil control. Es importante mencionar que este cáncer se presenta, principalmente, en mujeres de entre 30 hasta 60 años. Lo más grave es que esta neoplasia no se manifiesta de ninguna manera en su primera etapa, o bien, sus pocos síntomas se llegan a confundir con otras enfermedades.
Síntomas
+Distensión abdominal o hinchazón: si estas molestias son recurrentes se debe acudir al médico.
+Estreñimiento: los calambres, la indigestión o el dolor abdominal frecuente pueden ser una señal de alerta.
+Dolor pélvico: es uno de los síntomas que pueden identificar la enfermedad, en especial si es un dolor intenso y constante.
+Dolor de espalda: justamente en la parte baja de la espalda, puede ser una manifestación de cáncer de ovario.
+Micción incontrolable: sentir muchas ganas de orinar la mayoría del tiempo es una señal de que algo no está bien; al igual que sufrir de dolor y/o ardor al ir al baño.
+Pérdida de peso: si se pierde mucho peso inexplicablemente es un indicador de que el organismo está sufriendo.
+Fatiga: sentirse sin energía, cansada y débil todos los días en todo momento no es para nada normal y podría ser un síntoma de la enfermedad.
+Dolor durante el acto sexual: si la penetración causa dolor es importante consultar al doctor.
Quien sufra estas molestias tiene que practicarse un ultrasonido y en caso de que sea cáncer las instituciones de salud pública están obligadas a recibir y atender a las pacientes. La Dra. Gallardo confirmó que ya existe un gran avance en cuanto al tratamiento integral contra el cáncer, el cual está cubierto por el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del Seguro Popular.
En el 2017 serán 11 los hospitales acreditados para tratar la enfermedad; no obstante, el problema no es el tratamiento sino la falta de asertividad en los diagnósticos y la detección temprana del padecimiento. Por otro lado, se sabe que esta grave y engañosa afección es la tercera más frecuenta en la mujer.
El cáncer de ovario es la enfermedad de mayor letalidad, pues 70 % de las diagnosticadas no sobreviven.
No existe ninguna razón para no darte el tiempo necesario de visitar a un especialista y buscar un diagnóstico; se trata de tu vida, la cual vale más que cualquier otra cosa. Fuente: Cultura Colectiva
